La Escondida, un lugar mágico en las afueras de la CDMX

Al viajar por carretera desde la Ciudad de México hacia Toluca, por el kilómetro 38.5 algo saltará a tu vista: un chef gigante sosteniendo una trucha y un cabrito, esta es la señal que te indica que llegaste a el restaurante La Escondida, un lugar que te sorprenderá por su belleza y por la variedad de sabores que puedes encontrar ahí. La mencionada figura de chef resulta ser la única señal hacia el exterior que no esconde la presencia de un lugar espectacular dentro del bosque, pues el restaurante hace honor a su nombre y se encuentra escondido de la vista general de los viajeros.

Al entrar lo primero que encontrarás será un gnomo o duende que te da la bienvenida, y simbólicamente te invita a pasar, este representa muy bien el ambiente que hay en todo el lugar pues parece un espacio salido de un cuento de hadas, entre más te vas adentrando más compruebas que esto es verdad, pues puedes toparte con maquetas de castillos, puentes adornados con enredaderas, jardines, ciudades miniatura y demás artilugios que recuerdan a algún cuento ocurrido en el bosque, incluso hay un pequeño lago con cascada donde si tienes suerte verás patos y gansos nadar.

Historia del lugar

La historia que nos muestran en su sitio oficial es una mezcla de leyenda e historia verídica, que parte desde la época de la Revolución, pues cuentan que este era un sitio frecuentado por buscadores de tesoros que estaban en busca de la fortuna de Pedro “El negro”, finalmente en 1950 fue adquirido por Eduardo de Nicolás, quien empezó a darle el matiz de centro gastronómico para posteriormente, en 1959 convertirlo poco a poco en el restaurante que del que ahora versamos.

¿Qué comer en La Escondida?

Pero el lugar no es lo único llamativo y es que el restaurante sirve platillos como conejo, cabrito y trucha que puedes degustar en uno de sus salones y cabañas que por cierto te transportarán a brevemente a Austria, pues su estilo está inspirado en el las construcciones de de ese país. También puedes probar sus desayunos que antes se caracterizaban por servirse en bufete, pero por las condiciones de pandemia ahora su servicio es a la carta, estos se sirven en su salón de Armas abierto al público únicamente los fines de semana y que también funciona como mirador donde puedes deleitarte con una vista panorámica del lugar.

Si la naturaleza, los paisajes y la magia son lo tuyo, este lugar no te quedará a debiendo nada y seguro querrás regresar pronto, además, la variedad de platillos es tan grande que seguro querrás volver a probar más.

Posdata: ¡No olvides ir bien abrigado pues las temperaturas del lugar suelen ser bajas!

Horarios de servicio:

Lunes a viernes de 11:00 am a 19:00 horas.

Sábados y domingos de 9:00 am a 12:30 horas.

Carr Toluca - México Col-Km 38.5, Coapanoaya, 52740 Ocoyoacac, Méx.